martes, 27 de enero de 2009

Circuito Valle Viejo - Miculla - Tour Campiña de Tacna



Uno de los circuitos más antiguos de Tacna, data desde finales de los 70, conocido tan solo como campiña tacneña o Valle Viejo por su oferta gastronómica y posteriormente se incorpora el Centro Arqueológico de Miculla al circuito, así como el Museo Peñas y las bodegas artesanales, promovido por los agentes de viajes de la ciudad.

Ovalo de Pocollay

PLAZA AL CORONEL GREGORIO ALBARRACIN:
Fue un personaje, casi mitológico, por eso que sus aventuras bélicas durante la Guerra del Pacífico significaron el identificarlo con el Centauro de la mitología griega, mitad hombre mitad caballo.
El vecino ilustre de Pocollay Grl. Jorge Flores Torres comunica a esta alcaldía, el 18 de Marzo del presente año que sería enviada esta estatua ecuestre determinándose que fuera el Ovalo existente en la carretera internacional Tacna-La Paz, en donde se colocará el monumento a esta figura epónime del conflicto del Pacífico.


Iglesia Virgen de las Mercedes patrona del distrito de Pocollay.


En el lugar en que se encuentra la actual iglesia, anteriormente se ubicaba una capilla, que fue una iniciativa de Don Manuel Flores Calvo. En la actualidad se ha levantado la iglesia de la cual es Patrona la Virgen de las Mercedes; y esta se celebra cada 24 de Setiembre. En esa fecha los habitantes del distrito y de otros lugares con mucho respeto y religiosidad, la devoción a su Santa Patrona, se encuentra restaurada y en buen estado luego del terremoto del 2001.


La Plaza de Pocollay


La construcción de la Plaza data de 1958. Una comisión del Concejo Provincial integrada por los concejales Cayetano Cornejo, José Santos Guerra y Francisco Gonzáles Mantilla determinó la ubicación de la plaza y las calles. Una de ellas que fue la primera en ser trazadas, estuvo ubicada frente a la a la iglesia y días más tarde se construyó su respectiva vereda hay se encuentra restaurada y se alza en el medio de la plaza el Procer de la independecia peruano Don Francisco Antonio de zela.

Museo peañas
El cementerio arqueológico de Peañas, se encuentra ubicado al costado del CRAS en el distrito de Pocollay (valle medio del Caplina) a 614 m.s.n.m. El sitio estudiado tiene un área de 2,400 m2. Etimológicamente el nombre de “Peañas”, no tiene origen aymara ni quechua, es un arcaísmo castellano que señalaba los basamentos o soportes de retablos y altares.

El cementerio se descubrió accidentalmente el año 1981, cuando se realizaban excavaciones de zanjas para la construcción del CRAS. El Instituto Nacional de Cultura tomó conocimiento de los hallazgos e inició de inmediato los trabajos de investigación. Se recuperaron 56 contextos funerarios (tumbas) ubicadas en un terreno de topografía plana compuesta de tierra arcillosa en sus dos primeras capas naturales y el tercer estrato está compuesto por grava compacta y cantos rodados de río con arena.

Tipología de las tumbas:

En Peañas, las tumbas son hoyos cavados en la tierra, algunos revestidos con paramentos de rodados de río y lajas de piedra de cantería ideadas para recibir uno o dos cuerpos flexionados. La cubierta o tapa es una laja y/o acumulación de cantos rodados con grava. En resumen se definen dos tipos de tumbas: fosas y cistas, que por su diversidad han sido clasificadas en subtipos:

• TIPO “A”: Son fosas horadadas en un terreno compacto de grava, con una profundidad máxima de 1.60 mts. Y 1.20 mts. de diámetro, selladas por una laja. Se ubicaron un total de 11 tumbas de este tipo.
• TIPO “B”: Conocidas como cistas y son la mayoría, con paramentos de lajas y piedras alargadas, preparadas indistintamente de acuerdo a la disposición y arquitectura de la tumba. La profundidad máxima es de 1.05 mts. con un diámetro promedio de 50 cmts.

Los fardos y Ajuar funerario:

Se caracterizan por su posición flexionada o de cuclillas, enfardelados con una o dos envolturas de tejidos simples (cara de urdimbre) de lana de camélido color café o marrón oscuro, amarrados o sujetos con soguillas vegetales y de lana. Generalmente, los cuerpos se depositaron orientados al Este, asociados a ofrendas de cerámica, cestos, objetos rituales de madera, alimentos, ajuar de tejido, instrumentos musicales y agrícolas y alimentos. Algunos fardos fueron cubiertos por una esterilla de junquillo finamente trenzada. Los cuerpos se encuentran en aceptable estado de conservación y muchos de ellos presentaron indicios de haber sido removidos. Extraordinariamente se registró una tumba tipo cista con el entierro de un perro sin ofrendas.

Secuencia cronológica:

Sobre la base del análisis de la cerámica y demás objetos culturales, en Peañas se definieron varios grupos culturales ubicados dentro de los períodos Intermedio Tardío y Horizonte Tardío. En el Período Intermedio Tardío se han identificado los estilos costeros denominados San Miguel, Pocoma y Gentilar, ubicados entre los 1,100 y 1,445 años después de Cristo; y una cerámica de los valles de la pre cordillera de Tacna conocida como Cerámica del Estilo Sitajara. Para el Horizonte Tardío, se registraron cerámica del estilo Chuquibamba – Inka, cerámica Cusco Policromo y del estilo Saxamar o Pacaje negro sobre rojo.

Aprovechando el área de descarte del sitio arqueológico, se proyectó la construcción del museo, iniciándose su construcción el año 1990 mediante el convenio entre el INC y la Municipalidad Provincial de Tacna. Por razones de presupuesto recién entró en funcionamiento el 6 de junio del 2006.

El museo consta de dos (02) salas de exposición (sala regional y Sala Peañas), un depósito, laboratorio y gabinete en proceso de implementación, una oficina, un módulo para la guardianía, dos baterías de SS.HH, una boletería y un sistema de pasarela aérea en madera para observar las tumbas “in situ”. Actualmente el Museo cuenta con un personal que hace las labores de guardianía y mantenimiento y la asistencia profesional de los arqueólogos, conservadores y promotores culturales del INC Tacna. (Texto: Jesus Gordillo Vegazo)


Bodegas Turísticas En el recorrido podemos encontrar diversas bodegas artesanales que dan atención todo el día. Una de ellas y de mayor visita turística es la bodega "Don Miguel" donde la señora Hilda Cuadros de Ayca recibe con su característica calidez a los visitantes, degustando en forma gratuita los diversos productos de la zona, como piscos, vinos, macerados, licores, etc, la Bodega Don Miguel a sido premiada en reiteradas oportunidades entre ellos medalla de Oro en el concurso nacional del Pisco.

Iglesia de Pachía

Campo de petroglifos de san Francisco de Miculla
Ubicado a 22 kilómetros de Tacna. Este mágico campo se halla en medio de un paisaje desértico rodeado por los cerros Wawapas y Miculla. Son destacables sus representaciones de cacería, baile y de tipo mágico-religioso. Se considera que su antigüedad se remontaría al Tiahuanaco medio (500 d.C.) prolongándose hasta el Intermedio Tardío (1445 d.C.) Esta rodeado de un impactante paisaje desértico combinado con pequeñas lomas y bajo la tutela de los cerros Wawapas y Miculla a 1200 msnm.

Petroglifos de Miculla

Tenían ganas de contar historias, pero no contaban con la escritura. La única forma de hacer imperecederos sus recuerdos fue tallar las ideas en piedras. Estamos hablando de mil 500 años antes de Cristo.
En los petroglifos de San Francisco de Miculla se encuentran representadas todas las actividades del hombre del pasado, es decir, la forma como cazaban y sobrevivían. Se trata de una cápsula del tiempo para todo aquel que visite este lugar.
A sólo 22 kilómetros de la ciudad de Tacna, media hora en auto, se puede encontrar parte del pasado de esta región, considerada dentro de la zona centro sur andina y asentada, además, bajo la influencia de la cultura Tiahuanaco.
Situada a mil 200 metros sobre el nivel del mar, hallamos un área aproximada de 20 kilómetros cuadrados de una impresionante concentración de arte rupestre.
Un desierto que en su extensión y su olvido guardan recuerdos de aquel lugareño que no encontró mejor forma de dejar su huella, además de ser muy cuidadoso de mostrar los detalles de su vida día a día.
Grabados hechos por el hombre en la superficie de rocas calcáreas o de sílice rojiza de diversos tamaños, utilizando para ello percutores de piedra para tallar figuras mediante las técnicas del raspado.
En muchos de estos petroglifos podemos encontrar representaciones de figuras humanas, fauna y una clara expresión del culto a la fertilidad.
Iconografía
La iconografía en las culturas prehispánicas es muy difundida, ya que no se pudo lograr el desarrollo de una escritura formal.

Por ello, los estudios históricos han demostrado que a través de las imágenes que dibujaban en piedras y cuevas se ilustraba la vida cotidiana, las actividades religiosas, y los conceptos de la vida y de la muerte.
Asimismo, se mostraba la relación hombre-medio ambiente, la creación de dioses (su transformación y jerarquía), la posición del hombre en el universo, y las formas y contenidos de la ideología.
No obstante, la religiosidad se convirtió en el principal generador de la creación de símbolos e imágenes, en torno a los cuales giraba el destino y estado de ánimo de estas poblaciones.
Una de las más importantes imágenes talladas en los petroglifos de Miculla es, sin lugar a dudas, el Señor de las Serpientes o Señor de las Aguas.
En ella se puede ver a una figura humanoide con los brazos extendidos y sosteniendo en las manos algo parecido a unas serpientes, pero los estudios dejan entrever que esta representación se relaciona con el agua que hacía fértiles sus campos agrícolas.
Otra representación es la del puma, animal que representaba la fuerza, el dominio, el poder y la fertilidad en las culturas de los Andes del centro y centro-sur.
El puma aparece tallado en varias piedras, siempre de mayor tamaño y con la cola larga, ofreciendo una imagen de respeto y de veneración.
Este dato corrobora lo que los historiadores han indicado: que los dioses que aterraron y dominaron la ideología de las sociedades del período formativo (2 mil a.C.–200 d.C.), al que pertenecen los petroglifos de Miculla, tuvieron rasgos acentuados de origen felino.

Armonía
El arqueólogo Jesús Gordillo Begazo menciona en su libro de ensayos Patrimonio cultural, pensamiento andino y medio ambiente que los petroglifos de Miculla parecen representar el equilibrio armonioso entre el hombre y la naturaleza.
Sostiene que el hombre andino desde siempre se sintió parte del mundo que lo rodeaba hasta lograr convivir armoniosamente con él para satisfacer sus necesidades.
Por ello modeló actitudes, conductas y formas “de ser”, tras un largo período de adaptación y experimentación, cuando luego convive armoniosamente con su medio natural.
Esta relación (hombre y naturaleza) propició la construcción paulatina de su cosmovisión, que más adelante definiría el perfil de la religiosidad del mundo andino.


Baños Termales de Calientes.
A 22.8 Km al este de la ciudad de Tacna (20 minutos en auto). Ubicadas a orillas del río Caplina, a 1400 msnm son conocidas por sus propiedades terapéuticas para las enfermedades neuroartríticas y de la pile.
La temperatura de estas aguas oscila entre los 36º y 42º existen servicios de alimentación y de alojamiento en la zona.

Iglesia de Calana

No hay comentarios:

Publicar un comentario